En las últimas horas, el conflicto entre Rusia y Ucrania ha intensificado su foco en ataques con drones y operaciones militares clave. Rusia ha derribado un número significativo de drones ucranianos sobre su territorio, mientras Ucrania llevó a cabo uno de sus mayores ataques con drones contra Moscú, alcanzando objetivos estratégicos como una refinería y una central eléctrica.
Además, la ofensiva ucraniana en la región de Kursk continúa, y aunque ha obligado a muchos civiles a huir, también está forzando a las tropas rusas a concentrar sus recursos en defender este frente. Paralelamente, Rusia ha comenzado a utilizar drones de nueva generación que son casi indetectables debido a su tecnología de fibra óptica, lo que podría cambiar la dinámica en el campo de batalla.
Por otra parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha anunciado que presentará en septiembre un plan para poner fin al conflicto, aunque los detalles de este plan aún no han sido revelados